domingo, 19 de diciembre de 2010

Your Birthday

Ésta entrada te la dedico a tí. Aunque no sé si la leeras, no sé si esta página estará entre tus visitadas o no, pero de igual modo guardo la esperanza de que la leas. Porque va dedicada a tí, hoy, en tu cumpleaños, a tí, Miya.
El verano en el que te conocí. Estaba vacía en esos momentos. Estaba harta de chicos que rompían mi corazón, una y otra vez.
Recuerdo el foro donde nos conocimos, allá por julio. Ya ni siquiera lo tengo en favoritos. Recuerdo que empezamos con una relación tio-sobrina, ¿recuerdas? Aquellos buenos momentos, que disfrutabamos creando una gran familia entre todos. Hasta llegar a un momento en que no conocías a todos tus tios o hermanos. Era divertido. Cuanto quisiera regresar a esos tiempos.
Pero todo eso cambió un cuatro de agosto. Sí. Recuerdo perfectamente como fue. Me pediste que fuera algo más de lo que ya era.
Y me ilusioné, y dije que sí. Quién me iba a decir que llegaría a quererte tanto como te quise. Quien me iba a decir que viviría dias y noches esperando a que te conectaras, que dormiria para soñar contigo. Quien me iba a decir que iba a doler tanto querer en la distancia. Acepté porque te quería, pero nunca pensé que iba a ser tan complicado. Poco duró aquello. No podia aguantar más distancia, y creí que lo mejor sería olvidarnos, sería que no volviera a pisar ese foro ni volver a mi messenger. Pero no lo conseguí. Con el ordenador apagado no tenía nada que hacer, y a lo que hacía, una simple distracción hacía que me levantara y me conectara, tú.
Comenzamos a tratarnos exactamente igual. Y creo que, por ambas partes, era algo doloroso. Pero habia momentos felices entre todo eso.
Creo que aunque ninguno de los dos se fuera, el tiempo hizo de las suyas y nos separó. Quiero que sepas que espero que estes bien, que me gustaria volver a hablar contigo aunque no sepa de qué. No voy a pedirte que me admitas, o que me vuelvas a agregar, porque no sé lo que has hecho conmigo, pero no te voy a pedir nada. Solo queria recordar viejos tiempos escribiendo ésto.
Sabes que siempre seras alguien importante para mí. Sabes que siempre estaras en mi corazón, ¿verdad? Fuiste una de las excepciones. Gracias por abrir mi corazón y hacerme mejor persona, Miya.
Y, por supuesto, felicidades por tus veinte años.

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